No country for old men, de premio en premio

No country for old men se está convirtiendo día a día en la gran favorita para hacerse con el próximo Oscar de Hollywood a la mejor película. La asociación de crítica norteamericana ya la premió hace pocos días con ese mismo galardón, amén de concederle otro pemio a la mejor dirección a los hermanos Coen, y otro al mejor actor secundario, Javier Bardem.

No country for old men

La antesala de los Oscar siempre se ha dicho que son los Globos de Oro, cuya ceremonia ha sido suspendida por la huelga de guionistas, pero cuyos ganadores serán dados en rueda de prense esta misma noche en directo por la NBC. Y suenan fuertes las voces de que de nuevo No country for old men (no es país para viejos) volverá a ser la gran triunfadora.

Los hermanos Coen siempre han sido famosos por hacer películas que gozaban de ideas frescas, no tan encorsatadas como las que habitualmente se ruedan en Hollywood, guiones con ritmo dentro de ese cine con sello tan particular. Con Fargo ya vieron recompensado su trabajo, pero, sin embargo, una de sus útimas películas, Crueldad Intolerable, no alcanzó el nivel que deseaban entre el público y la crítica. Ahora han vuelto, y con fuerza. Tanto que probablemente también sean los galardonados con el Oscar.

Igual ocurre con Javier Bardem, un actor que va camino de convertirse en el mejor actor español de la historia de nuestro cine, desbancando a Antonio Banderas, quien tiene más nombre en las taquillas norteamericanas, pero en películas mucho más comerciales que las de Bardem. Éste es un actor que aporta a sus personajes una personalidad pronunciada, el dramatismo le fluye en cada movimiento y gesto; de hombre implacable, determinado… como su misma carrera.

En No country for old men interpreta a un asesino psicópata que persigue a Llewelyn Moss, interpretado por Josh Brolin, un hombre de la calle, que un día se encuentra con los resultados de lo que parece haber sido una batalla de drogas. Frente a él hay varios muertos, dos millones de dólares y mucha heroína. Moss no se lo piensa, coge la mercancía y el dinero, y con ello desencadena una espiral de violencia que lo llevará a ser perseguido implacablemente por varios asesinos.

Es una película de personajes profundos, de muy buenos diálogos, y de acción, pero no clásica, sino pausada y muy bien administrada durante todo el metraje. Un film en el que sin duda disfrutaremos con las interpretaciones y sobre todo, con la de Javier Bardem, que, sencillamente borda un papel que le viene como anillo al dedo.

Ficha técnica de No country for old men (no es país para viejos)